Chagas
Argentina es el país con mayor prevalencia de dicha enfermedad, con un 4% de la población nacional infectada (1.500.000 personas, principalmente del ámbito rural) y 2.000 bebés que nacen cada año con el parásito. Los tratamientos farmacológicos han logrado grandes avances, frenando por completo la transmisión congénita y evitando costosos tratamientos en el medio plazo. En la fase crónica de la enfermedad, un tratamiento antiparasitario puede frenar o prevenir su progresión y se puede curar si el tratamiento se administra al poco tiempo de producirse la infección.