El otro impacto del Covid: las consecuencias en la salud mental
Un nuevo estudio alerta que el coronavirus produce secuelas psiquiátricas y neurológicas. Además, afecta emocionalmente tanto a los que se infectaron como a los que no.
El coronavirus puede dejar muchas y variadas consecuencias a quienes lo sufren, incluso tiempo después de cursar la infección. Ahora, un nuevo estudio advierte por las secuelas neurológicas y psiquiátricas de la enfermedad, que se suman a los efectos psicológicos que genera tanto en quienes han estado infectados como en el resto de la población.
Los efectos neurológicos y psiquiátricos del SARS-CoV-2 siempre estuvieron en consideración, teniendo en cuenta los hallazgos en otros coronavirus. Rápidamente, se fueron sumando casos que sostenían esta hipótesis.
Pero una de las primeras evidencias sólidas las aportó un reciente estudio que se publicó en la revista The Lancet Psychiatry que realizaron investigadores de la Universidad de Oxford.
Analizaron los registros de salud electrónicos de 236.379 pacientes mayores de 10, mayoritariamente de Estados Unidos, y analizaron las secuelas que tuvieron, en este sentido, entre el día 1 y el 180 de la infección.
Los resultados fueron contundentes. Uno de cada tres pacientes que padecieron Covid tuvieron también un diagnóstico de una enfermedad neurológica o psiquiátrica en el transcurso de los seis meses, y el porcentaje se elevó al 46% entre quienes requirieron internación en Terapia Intensiva.
Los trastornos más comunes
Los investigadores analizaron la incidencia de un total de 14 trastornos en los sobrevivientes del Covid, que pueden agruparse en tres tipos. Las complicaciones neurológicas previas (como el Alzheimer) que elevan el riesgo; las del Covid agudo (como el síndrome de Guillain-Barré) y las que están asociadas al “long Covid”, la persistencia e incluso agravamiento posterior a la infección.
Estos son los problemas neurológicos y psiquiátricos más frecuentes que detectaron en la investigación:
- Trastornos de ansiedad: 17%
- Trastornos del estado de ánimo: 14%
- Abuso de sustancias: 7%
- Insomnio: 5%
- Accidente cerebrovascular: 2,1%
- Trastorno psicótico: 1,4%
- Hemorragia intracraneal: 0,6%
- Demencia: 0,2%
- Parkinson: 0,11%
La gravedad con la que se cursa la enfermedad tiene una relación directa con el mayor riesgo de estas complicaciones posteriores. Los investigadores plantean que los mecanismos potenciales de esta asociación incluyen la invasión viral del sistema nervioso central, los estados de hipercoagulación y los efectos neurológicos de la respuesta inmune.
Por lo tanto, hacen una advertencia sobre lo que dicen estos resultados: “Considerando la dimensión de la pandemia y la cronicidad de muchos de los diagnósticos y sus consecuencias (demencia, ACV, hemorragia intercraneal) es probable que ocurran efectos sustanciales en los sistemas de salud y sociales. Nuestros datos proveen evidencia importante que indica la escala y naturaleza de los servicios que puedan ser requeridos”.
El Covid, entonces, no solo implica una carga a los sistemas sanitarios en la atención de la infección, sino en los meses posteriores a ella por estos efectos de largo plazo.
El impacto emocional
Mucho se ha hablado sobre las consecuencias psicológicas del coronavirus y, en este sentido, también hay investigaciones que las enmarcan con datos. En Argentina, el Observatorio de Psicología Social Aplicada de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires viene monitoreando distintos aspectos emocionales de la pandemia desde sus comienzos.
En mayo, difundió una investigación hecha entre 742 pacientes que estuvieron infectados. El 24% reportó sintomatología ansiosa severa, el 56,74% presentó puntajes compatibles con un trastorno depresivo mayor y el 39,89% dijo haber cambiado su tendencia a pensar en la muerte y/o en el suicidio a partir de la pandemia. Por otra parte, el 64,4% mostró fallas cognitivas. El 32% dijo hacer tratamiento psicológico y el 67% de quienes no lo hacían consideró necesitarlo.
Los expertos de la UBA también consideran la necesidad de que el sistema de salud contemple este aspecto de la pandemia y recomiendan “realizar un especial seguimiento del estado psicológico de las personas que sufrieron Covid-19″.
Otro estudio, publicado al año del inicio de la pandemia, indagó en las emociones y percepciones de la población en general. La llamada curva de salud mental mostró un cambio de tendencia en cuanto a las emociones negativas respecto de la evaluación que se hizo a los seis meses de la pandemia, pero de todas maneras sigue mostrando valores altos en incertidumbre, preocupación, ansiedad, angustia y tristeza.
Qué se puede hacer
La Organización Mundial de la Salud dio recomendaciones para cuidar la salud mental durante la pandemia. Estos son algunos de esos consejos:
- Mantenerse informado con fuentes confiables.
- Seguir una rutina. Levantarse y acostarse todos los días a una hora similar.
- No descuidar la higiene personal.
- Tomar comidas saludables en horarios fijos y hacer ejercicio en forma habitual.
- Establecer horarios para trabajar y para descansar.
- Reservar tiempo para hacer cosas que se disfruten.
- Reducir la exposición a las noticias e intentar limitar la frecuencia con la que consumen noticias que causan preocupación o tensión. Informarse de las noticias a una hora determinada, una o dos veces al día de ser necesario.
- Mantener el contacto social y, si no se puede tener encuentros por las restricciones, sostener un contacto regular por teléfono o por medios digitales.
- Evitar el alcohol y las drogas. No empezar a consumir alcohol si nunca se había bebido antes.
- Controlar el tiempo de pantalla y no abusar de los videojuegos.
- Usar adecuadamente las redes sociales, para promover mensajes positivos y esperanzadores.
- Si se está en tratamiento por un trastorno de salud mental, continuar tomando la medicación según la indicación médica.
Fuentes:
Resultados neurológicos y psiquiátricos a los 6 meses en 236.379 sobrevivientes de COVID-19 (The Lancet Psychiatry), Secuelas psicológicas en personas que tuvieron Covid-19 (OPSA), A un año de la crisis: balance 2020 e impacto en la salud mental (OPSA), Cuidadosa-mente. Pandemia Covid-19: salud mental y neurológica (Pfizer – Upjohn), Organización Mundial de la Salud
Toda esta información tiene por objetivo contribuir a la concientización y al conocimiento por parte de la comunidad sobre diversos temas vinculados al cuidado de su salud. Sin embargo, bajo ningún punto de vista intenta reemplazar el diálogo médico-paciente, que es uno de los espacios más valiosos para conocer en profundidad sobre éste y muchos otros temas, preservar la salud como estado de bienestar general, prevenir el desarrollo de enfermedades, acceder al adecuado diagnóstico de determinados cuadros e iniciar el tratamiento que el profesional de la salud sugiera y consensue con el paciente.