Resistencia antimicrobiana: ¿Cómo hacer un buen uso de los antibióticos?
Estos fármacos revolucionaron la medicina, pero sus beneficiosos efectos se están viendo limitados por la resistencia antimicrobiana. Todos podemos contribuir a controlarla.
La resistencia antimicrobiana (RAM) es una de las amenazas más severas que enfrenta hoy la salud a nivel global. Cuando los agentes patógenos se hacen resistentes a los fármacos, es más difícil controlar las infecciones, con el consiguiente impacto a nivel sanitario y económico.
Los microbios desarrollan permanentemente nuevos mecanismos de resistencia y así un creciente número de enfermedades, como la neumonía, la tuberculosis, la septicemia o la gonorrea se vuelven mucho más complejas y a veces inclusive imposibles de tratar, porque los antibióticos van perdiendo eficacia.
Los medicamentos antimicrobianos ha sido revolucionario en la historia de la medicina: sólo basta con recordar las miles de vidas que permitió salvar la penicilina durante la Segunda Guerra Mundial y cuántas más las siguientes generaciones de antibióticos. Sin embargo, su mala utilización es una de las principales causas de la RAM. Por eso, resulta fundamental que pacientes, médicos y sistemas sanitarios hagan un uso correcto para frenar la resistencia.
¿Qué pueden hacer los pacientes?
- Es fundamental no autoprescribirse antibióticos suponiendo que la afección que se tiene es de origen bacteriano. Dejar esa determinación en manos del médico.
- Siempre pedir asesoramiento a un personal sanitario calificado antes de tomar un antibiótico.
- Seguir siempre las indicaciones de los médicos con respecto al uso de los antibióticos. No interrumpir el tratamiento antes de la duración dispuesta por el profesional, aunque mejoren los síntomas.
- Tomar medidas para prevenir el riesgo de infecciones: lavarse las manos correctamente, preparar los alimentos en condiciones higiénicas, limitar el contacto estrecho con otras personas cuando se está enfermo, evitar los riesgos durante las relaciones sexuales y mantener al día el calendario de vacunación.
¿Qué puede hacer el personal de salud?
- Prescribir antibióticos sólo cuando sean necesarios.
- Evitar las infecciones cuidando la limpieza de las manos, el instrumental y el entorno.
- Notificar las infecciones resistentes a los antibióticos a los equipos de vigilancia.
- Informar a los pacientes sobre cómo tomar los antibióticos correctamente, la resistencia a estos fármacos y los peligros de su uso indebido.
¿Qué pueden hacer los gobiernos?
- Mejorar la vigilancia de las infecciones resistentes a los antibióticos.
- Reforzar las políticas, los programas y la aplicación de las medidas de prevención y control de las infecciones.
- Informar a la población sobre el impacto de la resistencia a los antibióticos.
¿Qué puede hacer la industria farmacéutica?
- Invertir en la investigación y desarrollo de nuevos antibióticos, vacunas, productos diagnósticos y otros instrumentos.
Iniciativas de ANMAT contra la RAM
En Argentina, existe desde 2015 un área de trabajo específica para la problemática de la RAM denominada Comisión Nacional de Control de la Resistencia Antimicrobiana (CoNaCra), que es coordinada por la Dirección Nacional de Epidemiología.
En este marco, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) encargada de la fiscalización y el control de las drogas, alimentos, productos químicos, formas farmacéuticas, medicamentos, entre otros, lleva adelante el Plan Estratégico de CoNaCra 2018 cuyas acciones se enmarcan dentro de las 5 áreas prioritarias identificadas por la Organización Mundial de la Salud:
- Mejorar el conocimiento de la resistencia a través de la comunicación, educación y formación efectiva en salud humana, animal agrícola y de calidad de alimentos.
- Optimización del uso de antimicrobianos en salud humana y animal. Disminuir el consumo de antimicrobianos.
- Reducir la incidencia de infecciones mediante medidas eficaces de saneamiento, higiene y prevención.
- Reforzar los conocimientos y la base científica a través de la vigilancia y la investigación.
- Argumentos económicos a favor de una inversión sostenible, aumentar la inversión en nuevas medicinas, vacunas y herramientas de diagnóstico.
Fuentes:
Organización Mundial de la Salud, Servicio Nacional de Sanidad Animal, Ministerio de Salud
Toda esta información tiene por objetivo contribuir a la concientización y al conocimiento por parte de la comunidad sobre diversos temas vinculados al cuidado de su salud. Sin embargo, bajo ningún punto de vista intenta reemplazar el diálogo médico-paciente, que es uno de los espacios más valiosos para conocer en profundidad sobre éste y muchos otros temas, preservar la salud como estado de bienestar general, prevenir el desarrollo de enfermedades, acceder al adecuado diagnóstico de determinados cuadros e iniciar el tratamiento que el profesional de la salud sugiera y consensue con el paciente.